Cuando se nace mujer, se nace con una serie de responsabilidades, en la que cumple un rol fundamental ante la sociedad, anteriormente se maneja el concepto de que la mujer era criada para el hogar, la atención de la familia era fundamental, en especial el cuidado de los hijos. En la actualidad un nuevo paradigma entra en escena, donde la mujer con el paso del tiempo a entendido, que debe crecer como ser humano, manteniendo siempre la igualdad, considerando una serie de capacidades a desempeñar, entre ellas: Madre, hija, amiga, trabajadora, esposa, entre otros.
El día a día, nos ha enseñado que debemos creer en nosotras mismas, tomando nuevas posturas ante la vida, nos vamos más allá del género, vemos un ser humano que tiene la capacidad de crecer ante cualquier adversidad, se vale de sí misma, está preparada para manejar diferentes situaciones y emociones, convirtiendo las debilidades en fortalezas, maneja un alta autoestima, considerando que tiene un sin fin de metas por cumplir, teniendo en cuenta siempre la confianza en sí misma.
Cabe destacar que, necesita estar preparada, rompiendo el esquema de la subordinación, para no ser maltratada, ni humillada "a mujer empoderada es frágil fuerte, sensible pero no débil, tiene un corazón valiente, y dispuesto a dar amor pero no permite que la hieran".